MCH inaugura las compras del cuarto fondo de la entidad con una apuesta por la mezcla de innovación e industria textil. La gestora de capital riesgo ha tomado una participación del 35% en la empresa valenciana Jeanologia, especializada en la concepción y fabricación de tecnologías sostenibles para el sector textil, como el láser, donde es una referencia internacional. Los cálculos del mercado valoran la operación en alrededor de 20 millones de euros.
Es la primera vez que la familia Silla, propietaria del resto del accionariado de Jeanologia y que por tanto conserva una posición de control, abre la puerta de la compañía a un socio externo. Con la incorporación de MCH, los responsables de la empresa con el consejero delegado Enrique Silla a la cabeza buscan un revulsivo al proyecto de expansión trazado para los próximos años.
Los planes de Jeanologia pasan por duplicar el negocio de aquí a 2018, enfocando buena parte de los esfuerzos en la actividad de I+D+i, a la que orientarán una inversión de 10 millones de euros en este periodo, explican. La firma valenciana cerró el año fiscal de 2015 con una facturación de 32 millones y un resultado bruto de explotación (ebitda) de 7,5 millones, según datos de la empresa. Enseñas como Levis, Abercrombie & Fitch, Edwin Japan, Pepe Jeans, Diesel o Hilfiger Denim se encuentran entre los clientes de Jeanologia, uno de cuyos buques insignia es la tecnología aplicada a la producción de pantalones vaqueros.
Para la entidad de capital riesgo que dirigen Jaime Hernández Soto y José María Muñoz la entrada en Jeanologia representa, asimismo, un hito importante en la trayectoria del nuevo fondo de la gestora española, ya que la transacción da el pistoletazo de salida a las inversiones. MCH empezó a levantar este vehículo en 2014 con un objetivo de captación de 300 millones y, entre otros aportantes, ha recibido el respaldo del fondo de fondos del Gobierno, Fond-ICO Global. La entidad todavía está en proceso de recaudación. Desde el sector explican que materializar una compra puede contribuir a acelerar el cierre definitivo del fondo, atrayendo a los inversores aún indecisos.